Raíces y alas: quienes han dado forma a la educación costarricense

La educación costarricense ha sido, desde siempre, un punto de encuentro entre vocación, esfuerzo y servicio. Es una tarea que acompaña al país en cada etapa de su desarrollo, aun cuando los desafíos aumentan, los recursos no siempre alcanzan y cada vez menos personas eligen dedicarse a enseñar.
Aun así, día tras día, docentes de todo el país continúan abriendo puertas, guiando procesos, sosteniendo comunidades y marcando el camino de futuras generaciones. Esa labor silenciosa es la que mantiene viva la promesa educativa de Costa Rica.
Este blog busca reconocer ese trabajo y, al mismo tiempo, recuperar una parte valiosa de nuestra historia: las trayectorias de figuras que han dejado una huella profunda en la construcción del sistema educativo nacional. Muchas de ellas no siempre tuvieron visibilidad pública, pero su trabajo sigue siendo referencia para comprender quiénes somos y hacia dónde avanzamos.
Una profesión que sostiene al país
El Décimo Informe del Estado de la Educación (2025) señala una etapa compleja: brechas de aprendizaje, rezago en infraestructura, abandono escolar y una disminución en el interés por formarse en docencia.
A pesar de este panorama, la educación continúa avanzando gracias al compromiso de miles de profesionales que:
- Acompañan cada proceso de aprendizaje con cercanía y guía.
- Proponen soluciones desde las necesidades reales del estudiantado.
- Innovan dentro de las limitaciones del contexto.
- Mantienen vivo el vínculo entre familias, comunidades e instituciones.
- Impulsan proyectos y perspectivas que fortalecen la calidad educativa.
La docencia, más que una profesión, ha sido un eje de cohesión social para Costa Rica.
Un legado que merece ser contado
A lo largo de nuestra historia, diversas figuras han construido, modelado y transformado el sistema educativo. Algunas alcanzaron notoriedad pública; otras, aunque fundamentales, no siempre fueron reconocidas en su momento.
La genealogía recopilada por el Observatorio de Educación documenta especialmente la voz de educadoras que, desde distintos ámbitos, abrieron caminos para nuevas generaciones. Su aporte, sumado al trabajo cotidiano de miles de profesionales en todo el país, explica por qué la educación sigue siendo uno de los pilares más estables del desarrollo nacional.
Figuras que han dejado huella en la educación costarricense
A continuación, se presentan algunas trayectorias destacadas en la historia educativa del país, según la investigación recopilada:
Luisa González Gutiérrez
Maestra, escritora y activista social. Fundadora del primer kínder Montessori del país y promotora del acceso educativo para mujeres trabajadoras de escasos recursos. Defensora de derechos laborales y figura clave en movimientos sociales.
Estela Quesada Hernández
Primera mujer ministra de Educación, primera mujer ministra de Trabajo y primera mujer en integrar el Directorio Legislativo. Su recorrido político y educativo abrió oportunidades y transformó visiones sobre la gestión pública.
Carmen Naranjo Coto
Intelectual, embajadora, gestora pública, escritora y defensora de la justicia social. Sus contribuciones abarcan la narrativa nacional, políticas públicas, el acceso a servicios sociales y avances en educación y cultura.
Emilia Prieto Tugores
Educadora, artista, investigadora y pionera en el rescate de la cultura popular. Su trabajo documentó expresiones artísticas y tradiciones costarricenses, dejando un legado invaluable en la identidad cultural del país.
María Isabel Carvajal (Carmen Lyra)
Maestra, escritora y figura central en la literatura costarricense. Su labor pedagógica y compromiso social marcaron profundamente la visión educativa en contextos urbanos y rurales.
Emma Gamboa
Pedagoga, académica y referente del humanismo educativo. Su pensamiento crítico, producción escrita y liderazgo académico la convierten en una figura emblemática en la formación docente.
Victoria Garrón
Educadora, escritora y única mujer que ha ocupado la Vicepresidencia de Costa Rica. Su influencia trascendió el aula y se proyectó en cultura, política y pensamiento nacional.
Aportes desde el Ministerio de Educación Pública
Varias figuras clave también han impulsado transformaciones desde la gestión del Ministerio de Educación Pública. Entre ellas:
María Eugenia Dengo Obregón
Ministra de Educación entre 1978 y 1982. Prioriza la planificación educativa, el fortalecimiento de infraestructura y la educación de personas adultas con un enfoque territorial.
Astrid Fischel Volio
Ministra entre 2002 y 2003. Con un mandato breve y condiciones adversas, impulsó procesos de modernización y el fortalecimiento de la tecnología educativa.
Sonia Marta Mora Escalante
Ministra durante la administración Solís Rivera. Cumplió orientaciones educativas que abarcaban calidad, equidad, atención prioritaria, tecnología y derechos humanos.
Giselle Cruz Maduro
Ministra durante la administración Alvarado Quesada. Su trayectoria incluye múltiples roles técnicos y de liderazgo curricular dentro del MEP.
Estela Quesada Hernández
En su paso por el MEP durante la administración de Mario Echandi (1958-1962), impulsó la expansión de la educación secundaria y programas en zonas rurales.
Mirar atrás para comprender el presente
Este recorrido histórico no solo reconoce trayectorias individuales: permite entender cómo se ha construido el sistema educativo y cuáles han sido los hitos que marcaron cada etapa.
Las decisiones políticas, los aportes pedagógicos, las investigaciones y el trabajo cotidiano en las aulas conforman un entramado que explica tanto los avances como los desafíos actuales.
Hoy, frente a un contexto cambiante, esta mirada al pasado invita a valorar el compromiso de quienes, desde cualquier labor educativa, siguen guiando al país.
Este blog fue desarrollado con el apoyo y acompañamiento de Fernanda Segura Calderón, Coordinadora del Observatorio de Educación de la Universidad Americana.